Como el ciclohexano está constituído por enlaces sencillos, la rotación de los mismos es posible y da lugar a un equilibrio conformacional en el que la silla se invierte.
Con la inversión de la silla, las posiciones ecuatoriales pasan a ser axiales y viceversa.
El mecanismo de torsión de los enlaces implica el paso por conformaciones tipo "bote" y "bote torcido" con una barrera de invesión de casi 11 kcal/mol, unas 4 veces más que en el etano. A pesar de ello la barrera se sobrepasa varios miles de veces por segundo a temperatura ambiente.